(Un escrito para el alma del propio autor... Ω)
Te empapas de risas y suspiros
para dejar salir palabras escritas
en versos sin rima, de musas
muertas, asesinadas a golpes de
vanidad, de arrogancia y soledad…
Caminas bajo un manto estrellado
reino de dioses y grandes creadores,
mas dudas tú de su existencia misma
y te empapas de su belleza gótica
cuando nadie se encuentra a tu lado…
Aullidos de dolor en noches de luna llena,
muecas sin sentido y un estupor helado
de semblante caballeresco, que dibujan
en tu rostro, mapas de un amor incierto.
Besos en labios extraños de damas de
apacible inocencia.
Sutil como el tiempo,
silencioso como la muerte misma
a quien sedujiste al verla vestida de blanco
y labios carmín…
Te enamoras al instante en que besas,
pierdes la razón en cuanto empapan tu boca
de miel y tu cuerpo de caricias. Finalmente
te olvidas de todo cuando el sol asoma
en el horizonte su radiante fulgor…
Al fin vez aparecer en un rincón
un destello de amor, una mirada fugaz
asentándose en tu pecho mismo, pero…
pronto descubres su falsedad, una risa
burlona que congela lo poco que aun queda
de ti.
No obstante solo basta una caída, para
que la vanidad te haga levantarte de nuevo
en un grito de victoria lleno de dolorosa
resignación.
En tu pecho aun arde una ira
que no te deja respirar, te obligan
a olvidar sin quererlo, a lastimar sin sentir,
y de nuevo una musa en la noche estrellada
bajo la luna llena… se vuelve a suicidar…
